A veces, los datos son más que suficientes para que cada uno reflexione sobre lo que podemos hacer desde la responsabilidad que tenemos cada uno y el lugar en el que vivimos. Pues es frecuente tener la sensación, y por tanto tendemos a pensar, que las personas con preocuparnos de lo que nos afecta directamente ya hacemos lo suficiente. Y nada más lejos de la realidad, ya que hoy nos afectan y somos víctimas de tantos circunstancias que si realmente tuviéramos conciencia de todo lo que condiciona nuestra vida colectiva e individual, seguro que recapacitaríamos y nos volveríamos más generosos, solidarios y responsables, individual y colectivamente. Hoy ya no es suficiente con la ética individual, necesitamos practicar la ética de las organizaciones (Adela Cortina). Porque el bienestar individual y de las naciones depende del bienestar y el futuro de las demás naciones. Y la lucha por la mejora de la educación en el mundo es tan vital que si no logramos mejorar, especialmente, la educación de los sectores más desfavorecidos y pobres del planeta, nuestro futuro estará seriamente en peligro.
En torno a lo dicho anteriormente, siempre he pensado que ser coherente es tremendamente difícil, pues con frecuencia nuestros actos desdicen nuestras teorías, es decir, actuamos de modo muy diferente, si no de modo opuesto, a lo que decimos. Pero lo peor de todo es que en muchas ocasiones no tenemos conciencia a lo que contribuimos. Así he oído muchas veces a personas decir de su idea progresista de la vida y vivir y actuar del modo más burgués y falto de compromiso que se pueda imaginar. Incluso en el mundo educativo, es fácil observar profesionales que dicen defender la educación pública, pero su práctica profesional tiene más que ver con una escuela que excluye y sólo favorece a los buenos estudiantes. Teniendo una actitud poco acogedora hacia quienes tienen menos capacidad de adaptación a la escuela y, desde luego, manifiestan un menor interés por lo académico. A pesar de saber que de la única forma de salir del circulo de la pobreza, la violencia y la miseria, es la educación.
Siguiendo la petición de difusión os adjunto la siguiente información.
Estimadas y estimados colegas,
La web de la Década de la educación por un futuro sostenible (2005-2014) ha incorporado el boletín 94, titulado “La Cultura: elemento indispensable para la Transición a la Sostenibilidad”, al que puede accederse en http://www.oei.es/decada/
Rogamos contribuir a la difusión de este boletín, destinado a mostrar el papel esencial que la producción y consumo cultural puede y debe jugar en la transición a la Sostenibilidad.
Un saludo muy cordial,
Educadores por la sostenibilidad
NOTA: Hemos elegido como fecha de difusión de este boletín el 29 de marzo, por ser el día en que se celebra LA HORA DEL PLANETA, acción reivindicativa mundial en favor de la Sostenibilidad.
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Visitar Red Iberoamericana de Docentes de IBERTIC en: http://redesoei.ning.com/?xg_ source=msg_mes_network
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